Me dueles,
cuando esperas que me detenga
y corres con una esponja en la mano
a limpiar los vidrios de mi auto.
Me dueles,
cuando en medio de lluvia y frío
pasas un día vendiendo noticias
y te sorprende la noche
con el estómago vacío.
Me dueles,
y ni siquiera te miro
cuando ingieres veneno
para convertirlo en bocanadas de fuego.
Me dueles,
y soy cómplice de tus verdugos
pues hasta este día nada he hecho
para mejorar tu presente, ni tu futuro.
Me dueles,
¿y cómo te lo digo?
me dueles,
por eso, mejor lo escribo
Beatriz Zapata Medinilla
1983
Comentarios
-
- 1. Andrea Merchan El 15/10/2013
Que poema tan real... de verdad que aunque nos duele a muchos no hacemos nada para cambiarlo... muy linda inspiracion
Añadir un comentario